Lana
La lana utilizada para nuestros diseños es 100% lana de oveja orgánica de las comunidades locales de tejedores artesanales de los Altos de Chiapas. Esta zona tiene una notable producción de lana que está siendo utilizada por las comunidades indígenas para sus vestimentas tradicionales. Estas ovejas son sagradas para estas comunidades y parte de su sustento. A diferencia de los productos de lana producidos en masa, estos no se procesan con productos químicos cáusticos, sino que se lavan y cepillan a mano.
Nuestro compromiso con la sostenibilidad, nos hace buscar procesos de producción y materias primas que dejen la mínima huella ecológica en la tierra. Para nuestras colecciones hemos utilizado esta materia prima para realizar piezas cómodas, suaves, atemporales y en armonía con la naturaleza.
La lana sagrada en los Altos de Chiapas.- San Juan Chamula es conocido por la incomparable belleza de sus textiles y bordados hechos a mano. En la montaña, el trabajo de la lana es especialmente famoso en este sitio.
Los Chamulas crían ovejas exclusivamente para obtener su pelaje y convertirlo en hermosas prendas típicas. Para ellos estos animales son sagrados y por eso los cuidan mucho. Pero además, sus textiles están bordados en lana de oveja ya que es una de las zonas más frías de Chiapas.
Desde el siglo XVI el 'venado algodonero' se convirtió en el Batsi Chij o la "verdadera oveja" y su "algodón" -el vellón- se convirtió en la materia prima del tradicional vestido de lana, símbolo de la identidad chamula y un importante ingreso fuente para sus hogares. Las mismas ovejas ahora se conocen como ovejas “Chiapa”, y se han convertido en animales sagrados para el pueblo Chamula y son tratadas como mascotas preciadas.
Un 'venado cubierto de algodón' es una imagen poética, pero la importancia social, económica y cultural de la oveja y su lana va más allá de la poesía para las mujeres chamula, quienes son las encargadas del cuidado de los animales y tienen la responsabilidad del procesamiento de la lana y el tejido.
Esta lana es única en México: casi 500 años de crianza, practicada por las pastoras y los tejedores indígenas, han creado un producto altamente especializado. Se hila a mano, lo que da como resultado un hilo de grosor desigual, que confiere al tejido su textura característica. Debido a que la lana no se trata industrialmente, conserva su brillo natural y permite lograr colores vibrantes durante el proceso de teñido.
Toda la lana que utilizamos en nuestras creaciones es hilada a mano con un huso de gota prehispánico por alrededor de 10 mujeres indígenas Chamula de diferentes pueblos de las tierras altas de Chiapas. Es un trabajo que requiere mucha mano de obra, por ejemplo, se necesitan más de 20 horas para procesar 1 kilo de lana y, a menudo, una alfombra tendrá más de 20 kilos de lana.
Debido a nuestra creciente demanda de materia prima, este año 2023 hemos retomado la colaboración iniciada hace muchos años con tres grupos de hilatura adicionales. Estamos comprometidos a que nuestra demanda sea constante para garantizar una fuente estable de ingresos para estas mujeres.