Artesanos de NACHIG |
Conozca a los artesanos detrás de nuestra ropa hecha éticamente y aprenda más sobre sus técnicas tradicionales."Toda nuestra familia trabaja en nuestro taller. Trabajamos todos juntos para hacer cada pieza de principio a fin".
Reyna
Artisans
12
Origin
16° 43' 50.02" N
-92° 43' 31.01" O
Tejedoras de Nachig
A unos treinta minutos de la bulliciosa ciudad de San Cristóbal de las Casas, encontrarás el tranquilo pueblo de Nachig. Es aquí, en este pueblo sin pretensiones, donde encontrarás a Reyna y su familia, la llamada familia de los tejedores.
Una vía principal cruza esta comunidad, con pequeñas casas, pequeños mercados de verduras y una hermosa iglesia donde los lugareños pueden rendir homenaje a su Santa Fátima. Este pequeño pueblo, entre las montañas de los Altos de Chiapas, es un pueblo colorido lleno de nativos que visten sus tradicionales trajes floreados. Mientras vamos a visitar a Reyna, lo que a menudo es tranquilo, entramos a una enorme casa familiar cerca de una escuela rural local. Nos reciben habitaciones llenas de luz, pisos de color turquesa brillante y un maravilloso atole, una bebida caliente hecha con maíz cultivado en casa. Reyna nos guió por el taller, explicando cómo cada habitación tiene un propósito diferente: una habitación para bordar, otra para tejer y otra para la construcción final. Tienen el sistema al dedillo.
Pero no dejes que esta máquina bien engrasada te engañe: todavía saben cómo divertirse. De hecho, en un día cualquiera, verás a estos tejedores tocando al ritmo de Ariana Grande o Jessie J mientras elaboran magistralmente sus increíbles diseños.
Una vía principal cruza esta comunidad, con pequeñas casas, pequeños mercados de verduras y una hermosa iglesia donde los lugareños pueden rendir homenaje a su Santa Fátima. Este pequeño pueblo, entre las montañas de los Altos de Chiapas, es un pueblo colorido lleno de nativos que visten sus tradicionales trajes floreados. Mientras vamos a visitar a Reyna, lo que a menudo es tranquilo, entramos a una enorme casa familiar cerca de una escuela rural local. Nos reciben habitaciones llenas de luz, pisos de color turquesa brillante y un maravilloso atole, una bebida caliente hecha con maíz cultivado en casa. Reyna nos guió por el taller, explicando cómo cada habitación tiene un propósito diferente: una habitación para bordar, otra para tejer y otra para la construcción final. Tienen el sistema al dedillo.
Pero no dejes que esta máquina bien engrasada te engañe: todavía saben cómo divertirse. De hecho, en un día cualquiera, verás a estos tejedores tocando al ritmo de Ariana Grande o Jessie J mientras elaboran magistralmente sus increíbles diseños.